05Ago
Informes de Salvador Di Stefano
05/08/2022 - Julieta Colella
Anuncios con sabor a poco, ¿continúa la confianza?
Una frase popular dice
que la felicidad es la diferencia entre la expectativa y la realidad. Si nos
basamos en esa expresión, el resultado de los anuncios de Sergio Massa como
nuevo Ministro de Economía fue negativo. Las expectativas eran muy altas y
estaban puestas en que iba a anunciar medidas contundentes que pudieran cambiar
el rumbo económico, sin embargo, la realidad dejó sabor a poco. Más allá de que
lo haya anunciado, resulta interesante analizar en qué contexto llega y con qué
herencia deberá luchar.
La primera decisión
que anunció fue la de cumplir la meta del 2,5% del déficit primario como
porcentaje del PBI, establecida en el Presupuesto Nacional. Según el último
dato informado por el Ministerio de Economía, el acumulado 12 meses a junio de
este año nos muestra un déficit primario de 3,3%. Este dato es el punto de
partida de Sergio Massa. Para alcanzar el objetivo deberá, en 6 meses, reducir
dicho déficit en 0,8 puntos porcentuales. Dicho así pareciera sencillo, sin
embargo, obliga aplicar una fuerte reducción de los gastos totales.
Recientemente
conocimos la recaudación tributaria al mes de julio. Al séptimo mes del año la
recaudación creció 87,0% de forma interanual, superando a la inflación del
período. Si bien el dato oficial lo conoceremos el próximo jueves 11 de agosto,
se estima que la variación mensual de precios podría ascender a 8,5%. Si eso
ocurre, la inflación acumulada 12 meses sería del 71,9%. En este caso, la
variación interanual de la recaudación total quedaría 15 puntos porcentuales
por arriba. Es la mayor tasa de variación desde abril 2021. En aquel momento la
recaudación tributaria llegó a crecer 105,2% respecto al año anterior, debido a
que abril 2020 fue uno de los meses más castigados por la pandemia.
Con respecto a los
tributos ligados al consumo, el IVA Consumo presentó un crecimiento interanual
de 79,4%, también quedando por arriba de la inflación estimada para el período.
Lo mismo ocurrió con lo recaudado por los débitos y créditos, incrementándose
más de un 85,0% respecto a julio del año pasado. Con respecto a los impuestos
patrimoniales, Bienes Personales se incrementó un 300,0%, mientras que por la
partida de Impuesto a las Ganancias la recaudación fue un 118,8% superior.
En junio, los
ingresos tributarios representaron el 91,3% de los Ingresos Totales. El 100,0%
lo completan los ingresos por la Renta de la Propiedad y los ingresos de
Capital. Según esta proporción, los datos de recaudación tributaria al mes de
julio y algunas proyecciones adicionales, los ingresos totales podrían crecer en
torno al 68,0% o 70,0% respecto a los ingresos totales de un año atrás. Para
empezar a colaborar con los objetivos del nuevo Ministro de Economía, los
gastos totales deberían empezar a crecer, no solamente a un ritmo inferior al
que vienen creciendo, sino a una tasa menor a la que crecen los ingresos
totales.
Al sexto mes del
año, los ingresos totales crecieron 56,8% mientras que los gastos totales se
incrementaron un 65,6%, casi 10 puntos porcentuales por arriba de los ingresos.
Aquí es donde radica el mayor desafío del nuevo gabinete, en ir reduciendo
dicha brecha.
El próximo 20 de
agosto conoceremos el resultado fiscal al mes de julio. De todas formas, los
resultados que se den a conocer ese día van a corresponder a la gestión,
cortísima, pero gestión al fin, de Silvina Batakis. Cuando la sucesora de
Martín Guzmán habló públicamente por primera vez y declaró que iban a trabajar
para conseguir un fortalecimiento de las cuentas públicas dijimos que había que
esperar al 20 de agosto para ver los primeros resultados. Siempre dijimos que
era mucho tiempo para una economía como la argentina. A las pruebas nos
remitimos.
Ahora, para empezar
a ver los primeros resultados de la gestión de Massa deberemos esperar al 20 de
septiembre cuando se informe el resultado fiscal a agosto. Otro período de
tiempo que resulta una eternidad.
El fantasma de una
fuerte devaluación sobrevuela hace tiempo. Se pensó que Sergio Massa podría llevarlo
a cabo. Según le respondió a un periodista, porque no fue algo sobre lo que
habló en su discurso, no procederán a devaluar. Indicó que trabajarán en
reducir las brechas cambiarias entre el dólar oficial y los dólares
alternativos mediante el fortalecimiento de las Reservas Brutas del Banco
Central. De todas formas, según lo que varió el tipo de cambio oficial en solo
4 días del mes de agosto, pasando de $ 131,27 al último día hábil de julio a $
132,64, nos estaría dando una tasa de devaluación mensual de 5,7%, superior al
promedio del 4,0% al que venía viajando el dólar oficial los últimos meses.
Con respecto a los
últimos meses, sin lugar a duda, la evolución de las principales variables a lo
largo de julio fue de las más turbulentas de los últimos tiempos. En tan solo
30 días las reservas brutas cayeron U$S 4.555 millones, los pasivos monetarios
aumentaron $ 608.928 millones, la inflación se estima del 8,5%, el dólar
oficial se incrementó 4,8% mientras que el informal 30,7%, alcanzando valores
récord de $355. Con respecto a los depósitos y préstamos, los depósitos en
pesos crecieron casi $400.000 millones, mientras los depósitos en dólares
cayeron U$S 815 millones. Por el lado de los préstamos, los que se realizaron
en pesos, subieron $ 303.840 millones, mientras que los que se otorgaron en
moneda extranjera se redujeron en U$S 147 millones.
Después del
discurso de Massa la pregunta era si, al abrir el mercado, las variables se
iban a comportar con el mismo nivel de confianza que demostraron tener cuando
se dio a conocer el nombre de quién reemplazaría a Silvina Batakis o si le
darían la espalda a un conjunto de medidas que dejaron sabor a poco.
En este primer día,
el dólar MEP subió 0,7% respecto a su cotización del día anterior mientras que
el CCL lo hizo en un 2,0%. Por su parte, el dólar informal empezó cotizando
$298, por debajo de la cotización del día anterior, para finalizar la jornada
en $293, casi $10 menos que el día anterior, dependiendo la plaza que se
consulte.
El Riesgo País
continuó en baja, alcanzando los 2.406 puntos. Por el lado de las acciones, el
Merval tuvo un leve comportamiento alcista. Los que no consiguen recuperarse
son los bonos soberanos en dólares, los cuales, no solo que continúan cotizando
a precio de default, sino que siguen bajando. Por ejemplo, el AL29 cayó 1,2% en
un solo día, mientras que el AL35 lo hizo en 2,9%. La desconfianza se agrava en
el largo plazo.
A pesar de que las primeras medidas anunciadas no
fueron lo que se esperaba, pareciera que el mercado y gran parte de la política
siguen apostando por Sergio Massa. De todas formas, y tal como él mismo dijo,
no creemos que sea una figura que pueda solucionar los problemas estructurales
de la economía argentina sin cambios contundentes. Habrá que esperar a que se
sigan conociendo los nombres de quienes lo acompañarán en la gestión del
Ministerio, ver cómo resulta la gira por el exterior, la cual ocurrirá a fines
de este mes y cómo se comportan las principales variables de la economía. Más
allá de los mercados y la política, a Massa todavía le falta aval de la
ciudadanía en general. Para que eso ocurra deberá trabajar en bajar la
inflación, fortalecer el poder adquisitivo, mejorar los niveles de consumo y
bajar la brecha cambiaria. Sin el apoyo del ciudadano de a pie, lejos estará
las posibilidades de alcanzar la presidencia el año próximo, si es que esas son
las aspiraciones del nuevo ministro de economía.