30Nov
Informes de Salvador Di Stefano
30/11/2022 - Salvador Di Stefano
El precio del dólar es una ganga
El problema de Argentina es
que gastamos por encima de nuestras posibilidades, y esa diferencia la
financiamos con emisión monetaria. Si gastáramos solo lo que permiten los ingresos, no tendríamos que emitir y la inflación sería menor.
En los últimos 12 meses el
Banco Central República Argentina efectivizó adelantos transitorios a la Tesorería por $ 1.305.051 millones, pagó intereses de leliq por $ 2.898.254
millones y emitió para comprar bonos del Estado por $ 1.288.766 millones.
Entre las tres fuentes de emisión sumó un total de $ 5.492.071 millones.
A esta friolera de emisión
tendremos que sumarle que en estos días estamos emitiendo para que los
productores agropecuarios liquiden dólar soja a $ 230, cuando las importaciones
se pagan a $ 167, lo que implica una pérdida de $ 63 por dólar para el Banco
Central. Un verdadero negocio chino.
Respecto a la soja, en el
mercado, la posición diciembre vale U$S 370,5 la tonelada que, a una cotización
de $ 230, nos da un valor de $ 85.215 la tonelada. Resulta llamativo que la posición
enero vale U$S 407,50, la posición febrero U$S 393 y la posición marzo U$S
386,50. ¿Será que la exportación tiene espacio para pagar un poquito más y no lo
hace? El precio FOB de la soja es de U$S 589, cuando paga apenas U$S 370,5 nos
da a pensar que podría pagar algo más. La exportación podría decir que la soja
se utiliza para transformarla en aceite y harina de soja, en este caso tampoco
vemos una baja respecto a los meses anteriores, por ende, algo más podría
pagar. En breve te diremos lo que podría efectivamente pagar.
En resumen, el Banco Central
tiene 4 fuentes de emisión, adelantos transitorios a la Tesorería, pago de
intereses de la leliq, compra de bonos en $ y compra de U$S soja.
Por el lado de las reservas,
siguen cayendo respecto a los niveles que teníamos un año atrás, al 25 de
noviembre de 2021 las reservas eran de U$S 42.238 millones, mientras que, al 25
de noviembre de 2022, suman U$S 37.538 millones, lo que refleja una merma del
11,1%.
El stock de la base monetaria
suma $ 4.428.452 millones y crece el 37,8% anual, es un aumento muy bajo si
estimamos que al mes de noviembre la inflación seria del 6,0% y en los últimos
12 meses sumaría el 94,4%. Esto es recesión.
El gobierno cuando emite
pesos, una parte los deja en el mercado y otra lo retira del mercado vía
colocación de letras y pases, por los cuales paga una tasa del 75% anual. El stock
de este endeudamiento pasó de $ 4.221.115 millones hace un año atrás, a $
9.101.385 millones en la actualidad lo que suma un aumento del 115,6%.
La suma de los pasivos monetarios
no remunerados y remunerados (Base Monetaria más endeudamiento) pasó de $
7.434.653 millones a $ 13.529.837 millones, lo que nos da un aumento del 82,0%
anual. Algo menos que la inflación del 94,4%.
El dólar de equilibrio, que
surge de comparar el total de los pasivos monetarios versus las reservas, hace
un año atrás nos daba $ 176 y los dólares alternativos valían $ 203, mientras
que, en la actualidad, el dólar de equilibrio se ubica en $ 360 y los dólares
alternativos se ubican en $ 315.
Conclusiones
El gobierno arrastra en sus
cuentas públicas un enorme déficit fiscal que se incrementará en los meses de
noviembre y diciembre por el cierre de año. Es cierto que en los últimos meses
los ingresos fiscales suben más que los egresos fiscales, pero este esfuerzo no
logra revertir el resultado negativo de las cuentas públicas.
Se han anunciado en reiteradas
ocasiones que ingresarían dólares del exterior para fortalecer las reservas,
sin embargo, nada de ello ocurrió. La realidad es que el gobierno tuvo que
salir a implementar el dólar soja dos para lograr capturar más dólares de corto
plazo, que faltarán a mediano plazo, ya que la soja vendida no se multiplica,
es el stock que tenemos y toda venta hoy, hace que no la tengamos mañana.
Comprar dólares a un precio
alto, para venderlo a un precio bajo, no es negocio en Argentina ni en ningún
lugar del mundo, es el costo que paga un gobierno por financiarse en el
mercado. El resultado de esto será más inflación y mayor brecha.
Los productores están liquidando
soja U$S 370,50 cuando en verdad les deberían estar pagando mucho más. Según
nuestros cálculos, probablemente equivocados, los exportadores podrían estar
pagando U$S 400, ya que por exportar harina y aceite le bajaron las retenciones
2,0%. Esto implicaría que, el precio del mercado de la soja, debería ubicarse en
torno de $ 92.000 la tonelada y no los $ 85.215 la tonelada que se pagan
actualmente.
Las cuatro fuentes de emisión
que realiza el Banco Central nos llevan a una gran distorsión de precios
relativos en la economía, ya que financia al Tesoro, paga intereses de la deuda
del propio Banco Central, emite para comprar bonos y también para adquirir soja
a un precio diferencial. Todo esto nos lleva a que los pasivos monetarios sean
una presión alcista para la brecha entre los dólares alternativos y el dólar
mayorista.
Por ahora, y solo por ahora, los
dólares alternativos quedaron estacionados en torno de $ 320,0, sin embargo, si
el ritmo de emisión se acelera, tendremos precios más elevados para fin de año.
Las tasas de plazo fijo seguirán
en el 75,0% anual, lo que nos da una tasa efectiva del 107,0% anual, para
ganarle a esta tasa podés comprar una letra del Tesoro con vencimiento al 31 de
marzo del año 2023 que rinde el 117,1% anual (S31M3).
La inflación esperada por el
mercado ronda el 121,0% anual, surge de comparar el bono en pesos que vence el
17 de octubre de 2023 que rinde el 128,0% anual, y la letra en pesos ajustada por
inflación que vence el 18 de septiembre de 2023 que rinda el 7,0% anual
(X18S3).
La inflación noviembre 2022
medida 12 meses para atrás rondaría el 94,4% anual, a noviembre 2021 los
dólares alternativos estaban $ 203, comprarlos hoy a $ 320 lucen una ganga.
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Qué te deberían estar pagando por el trigo, maíz y la soja,
lo que se quedan los exportadores.