Foto de Salvador Di Stefano

Informes de Salvador Di Stefano

22Dic

Informes de Salvador Di Stefano

22/12/2022 - Julieta Colella

Superávit comercial con gusto a poco



Recientemente el INDEC dio a conocer el Intercambio Comercial argentino a noviembre de este año. Las exportaciones ascendieron a U$S 7.089 millones, experimentando un aumento interanual de 14,5%. Dicho aumento estuvo explicado por un incremento de 10,5% en los precios y de 3,5% en las cantidades. En lo que respecta a la comparación mensual, analizando la serie desestacionalizada, para quitarle cualquier efecto estacional entre diferentes meses, las exportaciones descendieron 3,6%.


Por su parte, las importaciones fueron U$S 5.750 millones. En este caso, disminuyeron 0,3% respecto a noviembre de 2021, equivalente a U$S 17 millones menos, debido a una contracción de 1,1% en los precios porque las cantidades aumentaron 0,8%. Sorprendió la caída de las importaciones porque hacía desde octubre de 2020 que no se registraba un descenso interanual en las importaciones.   


El intercambio comercial refleja la sumatoria de exportaciones más importaciones. Al mes de noviembre aumentó 7,4% en relación con igual mes del año anterior y alcanzó un monto de U$S 12.839 millones. Por su parte, la balanza comercial, es decir la diferencia entre las exportaciones e importaciones, registró un superávit de U$S 1.339 millones. Resultó el tercer mayor superávit del año; octubre dejó el superávit mensual más alto, siendo U$S 1.827 millones, seguido por abril, con un saldo positivo de U$S 1.454 millones.

En el acumulado de 12 meses, el superávit comercial asciende a U$S 6.115 millones, uno de los menores registros de los últimos 4 años. Deberíamos trasladarnos a junio del 2019, cuando el superávit comercial, acumulado 12 meses, fue de U$S 6.825 millones. Con respecto a noviembre del año anterior, la caída fue 56,4%, es decir U$S 7.900 millones menos, ya que el superávit anual había sido de U$S 14.015 millones.



La caída del superávit comercial es consecuencia directa del atraso cambiario. Un bajo tipo de cambio, sumado al fantasma de un posible salto devaluatorio y a la amenaza de mayores restricciones, generó incentivos a importar en mayores cantidades mientras que, al mismo tiempo, ocasionaba desincentivos a exportar, a la espera de poder vender a un mayor tipo de cambio.

El fantasma de la devaluación continúa. Si bien el gobierno declara que no van a aplicar una fuerte devaluación, hay que ver si la situación se lo permite. En caso de que se vean obligados a hacerlo, seguramente ocurra durante los primeros meses del año, en primer lugar, porque la atención pública todavía estará puesta en otro lado y, en segundo lugar, porque van a faltar varios meses para las elecciones lo cual les daría margen para revertir cualquier escenario negativo que la devaluación ocasione.


 

HACENOS TU CONSULTA

No es solo análisis, es una visión
de cómo hacer las cosas

CONTACTANOS