
09Abr
Me gusta el campo
09/04/2023 - Salvador Di Stefano
Lo que viene para el campo y el contrato de alquiler
Se viene la época de firmar
los alquileres de la campaña 2023/24, hay que cambiar las formas de redactarlo
luego de la desaparición del precio de pizarra, y la aparición del dólar soja.
Una guía para tener en cuenta, cada caso será un mundo.
¿Qué
pasó esta última campaña con los alquileres?
. - El 70,0% del campo argentino es trabajado por productores que alquilan la tierra. El uso y costumbre hizo que
muchos contratos se hicieran de palabra, cuyo precio es el precio pizarra de la soja por el equivalente
a una cantidad de quintales. La modalidad de pago es muy distinta, hay
mensuales, anuales, trimestrales o bien sin especificar. En todos los casos se
utiliza como unidad de medida soja, pero puede que el productor siembre otro
producto.
¿Qué
problemas surgieron?
. - El dólar soja generó una
distorsión en los costos, el que hacía soja no encontró una gran variación, ya
que pagó soja con soja, pero quien sembró maíz, trigo u otros productos, vio
cómo sus costos se incrementaron notablemente. Por otro lado, se destruyó el
mercado de futuros, con variaciones antojadizas en la cotización en dólares. El
que vendió la soja por necesidad y luego tuvo que pagar un alquiler con un
dólar soja hoy está al borde de la ruina. Lo mismo sucede con el que tuvo que
pagar el dólar soja y sembró otro cultivo.
¿Cuánto
valía la soja un año atrás?
. - Un año atrás la soja valía
U$S 425 la tonelada, hoy vale U$S 366 la tonelada, tenemos menor precio en dólares,
pero más tipo de cambio por la intervención del Estado al hacer un dólar
especial. Insólito porque en las posiciones futuras de la soja, el precio en
dólares salta por las nubes, por ejemplo, la posición julio vale U$S 406 la tonelada.
La soja con el dólar especial vale más en pesos, pero menos en dólares,
ganancia para el exportador. El productor es la Familia Miranda, mira cómo su
guita se la lleva otro.
¿Se
viene la época de cerrar los alquileres de la campaña 2023/24?
. - Creo que tendremos que
reformular los alquileres ya que, con la aparición del dólar soja, muchas cosas
cambian.
¿Qué
recomendaciones nos podés hacer?
. - Con un grupo calificado de
productores tiramos algunas ideas que podrían ser de alta utilidad, de ningún
modo somos dueños de la verdad, cuanto más se hable el tema, creo que estaremos
más cerca de algún acuerdo razonable.
¿Vamos
a las reflexiones?
. - Lo primero que tenemos que
aclarar es que este cambio en los contratos debe realizarse en función de que
el Estado intervino el mercado de granos con tipos de cambios diferenciales que
cambiaron la ecuación económica y ahora hay que readecuar los contratos existentes.
Los dos grandes temas a contemplar es un tipo de cambio diferencial que
complica el escenario del productor. Por otro lado, la desaparición del precio
pizarra, algo que la Bolsa de Comercio de Rosario no pudo resolver.
¿Cómo
se resuelven estos dos temas?
. - En primer lugar, deberíamos
cambiar la forma de realizar los contratos, el que siembra soja que pague soja,
pero el que siembra maíz, trigo u otro producto que realice un contrato en
maíz, trigo u otro producto, de lo contrario no son manejable los costos. Los
contratos podrían ser a quintales fijos o a porcentaje.
. - En segundo lugar, hay que
dejar de utilizar el precio pizarra para los contratos. Se dan muchas discusiones
cuando no hay un precio cierto. Desde nuestro punto de vista, habría que tomar
el precio soja a futuro mayo de la campaña en curso. Por ejemplo, para pagar el
alquiler de la próxima campaña se debe tomar el precio soja futuro mayo 2024,
que hoy está en U$S 363,5. El tipo de cambio que se utilice debería ser el del
día que se realiza el pago, por ejemplo, si hacés pagos parciales, pagás el precio
futuro de la soja mayo 2024 por el precio del dólar del día que se paga. De
esta forma el productor puede ir calzando sus costos en el mercado de futuro o
bien realizando ventas a futuros a la exportación con precio determinado. Cuando
el dueño del campo no quiera cobrar y esperar, puede plantearlo y especular con
un mayor precio, pero siempre teniendo en cuenta el precio de la soja futura a
mayo 2024 fecha límite para cobrar. Los pagos se realizarán en pesos, por lo
tanto, el dueño del campo no necesita inscribirse en ningún registro para
cobrar, es más puede fijar precio durante el contrato de alquiler cuando lo
desea y cobrarlo a mayo del año 2024, el productor deberá decidir si se calza o
no para enfrentar esa obligación.
¿Cómo
debería ser el contrato?
. - Dada la sequía imperante y
los pésimos resultados, muchos dueños de campo desean dejar de alquilar a
porcentaje, pretenden un ingreso fijo y predeterminado. Los productores no
desean pagar más precios fijos, dado que la sequía hace que paguen más del 100%
de lo que tienen de ingreso. Para
nosotros lo mejor en el contrato es un precio piso y luego llevar los valores a
resultado. Por ejemplo, un campo en zona núcleo paga 16 quintales sobre un rinde
estimado promedio de 40 quintales. Nuestra propuesta es que se realice un
contrato por un alquiler de 10 quintales, por una producción de 28 quintales
por hectárea, y que este sea el precio base del cálculo. Desde ese rinde en
adelante, los quintales que se consigan se reparten por partes iguales, y se
pagan al final del contrato. De esta forma el productor gana en su
planificación financiera, porque el pago que adelanta del alquiler es
significativamente inferior al de años anteriores. Los mayores pagos se
realizan terminada la campaña. Aclaramos que no se paga en quintales físicos,
el equivalente de quintales físicos en pesos.
¿Me
das un ejemplo?
. - Supongamos que pagás un
alquiler en cuatro pagos. El primero antes de sembrar, el segundo en octubre,
el tercero en diciembre y el último finalizada la campaña.
Primer pago 2,5 quintales determinado
por el precio futuro mayo 2024 y al tipo de cambio del día de pago. Así sucesivamente
los otros pagos.
Si al finalizar la campaña el rinde
del campo fue 40 quintales, el arrendador (dueño) cobraría 6 quintales
adicionales, al precio de la posición dólar mayo 2024 al valor del dólar que
esté en dicha fecha. El alquiler total sería de 16 quintales por un rinde de 40
quintales.
Si al finalizar la campaña el
rinde del campo fue 50 quintales, el arrendador (dueño) cobraría 11 quintales
adicionales, con lo cual el alquiler total será de 21 quintales por un rinde de
50 quintales.
¿Qué hacemos con el dólar soja?
. - Respecto del que siembra
soja no hay problema porque el precio se termina calzando, es soja por soja, el
problema es para el que no realiza soja, aquí hay dos alternativas. La primera
es realizar contratos fijados en el mismo producto que se siembra, de esta
forma despejamos el problema, el productor siembra maíz y paga un alquiler en
maíz, pagando precio a futuro próxima campaña y al tipo de cambio del día que
se realice el pago. Una segunda alternativa podría ser hacer los contratos en
soja, pero repartir las ganancias del mayor precio del dólar soja, por ejemplo,
del mayor valor del dólar soja repartir un 50% para el dueño de la tierra, y un
50% para el productor.
Conclusiones
. - Los cambios en los nuevos contratos
de alquiler son necesarios para que el productor tenga posibilidad de manejar los
costos.
. - El precio de la soja a
tener en cuenta debe ser el precio de la soja futuro mayo 2024 y no el precio
de pizarra. De esta forma se puede trabajar con un costo predeterminado y se
puede utilizar el mercado de futuro como cobertura. En esta última campaña
tuvimos muchos problemas al no existir un precio de pizarra, o bien estar en discusión
permanente cuál es el precio que efectivamente lo reemplaza. Los contratos
deben ser claros y transparentes, lo mejor es el precio futuro, sea cual sea el
producto, calzado con la fecha en que se cosecha.
. - Aquellos que realicen
pagos parciales lo harán al precio del futuro mayo combinado con el precio del dólar
mayorista al día que realice el pago. El arrendador o dueño puede fijar el
precio de la soja en dólares para cobrar a futuro. Un beneficio más para el
dueño del campo, que cuando le gusta el precio lo cierra y lo cobra en mayo. El
arrendatario deberá definir si hace o no cobertura ante este beneficio del
dueño.
. - Los contratos deberían
realizarse en el producto que se siembra, no tomar a la soja como unidad de
medida de todos los contratos, ya que un dólar diferencial genera cambio de
costos que son imposibles de recuperar. En resumen, si vas a producir maíz
realiza un contrato en cantidad de quintales de maíz, y así sucesivamente para
cualquier tipo de cultivo. Quienes no desean adaptarse a esta nueva realidad,
se les puede proponer compartir en partes iguales el mayor valor del dólar
soja, como forma de atemperar los problemas de costos.
. - La sequía demostró que los
dueños no están conformes con un contrato a porcentaje, y que los productores
no están conformes con un contrato a quintales fijos. Hay que pasar a un mix de
quintales fijos de base, y premio por producción llegando al mismo nivel de
remuneración, pero partiendo de desembolsos más bajos por parte del productor a
la hora de iniciar el contrato. Es lo que debería llamarse esfuerzo compartido.
. - Se pueden hacer millones de consideraciones, y
todas serán bienvenidas, el objeto de esta nota es sentar la base para discutir
los contratos de locación futuros, tratando de ser ecuánimes entre los
intereses del productor y el dueño del campo. Como no hay una ley que determine
estos vacíos, hay que hacer un esfuerzo para alcanzar el justo medio, y las
partes poder seguir trabajando y obteniendo una renta razonable. En alguna próxima
nota, podríamos abordar el tema de re determinación de cálculo de pago en los
contratos en caso de eventos no controlables por el productor, como podría ser
el clima, una maleza o plaga que sean variables incontrolables que afecta la
forma de pago de los contratos. También podríamos comenzar a estudiar si se
podría generar un “índice de arrendamiento agrícola” que se un mix de un campo
en donde se trabaja un tercio de soja, un tercio de maíz y un tercio de trigo,
u otras variantes que contemplen distintos cultivos.
. - Cualquier aporte será bienvenido, esto surgió del debate de un grupo de productores en el foro de Agroeducación.