
19Oct
Informes de Salvador Di Stefano
19/10/2023 - Salvador Di Stefano
Sin plan Bonex, ni reestructuración de deuda.
El próximo gobierno tendrá
el desafío de lograr superávit fiscal, para resolver el pasivo del Banco
Central, y lograr pagar la deuda pública. No hay otro camino.
El mercado ve números y
automáticamente se asusta, se habla de incendios, explosión, violación de
contratos y todo tipo de situaciones traumáticas, pero hay que ir separando
términos.
Las
leliq y pases: El monto total se ubica en $ 21,5 billones
de pesos, si lo convertimos a dólares se ubica en los U$S 61.500 millones. Las
leliq pagan una tasa del 11,0833% mensual, cada 3 meses los intereses equivalen
al 37,1%, esto implica que devengan intereses por $ 8,0 billones, cuando la
base monetaria el día 11 de octubre es de $ 7,3 billones. Esto implica que los
intereses de la leliq y pases devengan cada 3 meses el equivalente a algo más
de una base monetaria. Al ritmo actual, para fin de año el stock de leliq
rondaría los $ 30,0 billones.
Es imposible encontrarle una
solución que no venga por el lado de una mejora en la reputación de Argentina a
nivel internacional, esto implicaría que el país pase de un déficit fiscal del
4,3% del PBI a un superávit fiscal. De esta forma, la Tesorería no requeriría
más financiamiento, por lo tanto, no habría asistencia por parte del Banco
Central, y se dejaría de emitir moneda. Paralelamente a ello, el mercado
debería encontrar un nuevo punto de equilibrio para el dólar, nosotros estimamos
un dólar para diciembre de $ 660, si las leliq ascenderían a $ 30,0 billones,
estarían valuadas en U$S 45.454 millones, un valor muy elevado.
Para poder solucionar el
problema de las leliq es necesario que el país logre equilibrio fiscal, ajuste
el precio del dólar, baje la tasa de inflación, interés y se genere un shock de
confianza que haga que renazca en el mercado la necesidad de demandar pesos.
Daria la sensación que es un camino muy largo, pero no imposible.
Los caminos vinculados a la
violación de los derechos de propiedad no parecen los mejores, teniendo
presente que el presidente electo tendría que soportar un costo en su
credibilidad muy elevado, y se le dificultaría recuperar confianza durante su
mandato.
La
deuda pública: Al 31 de junio del año 2023 es de U$S
403.836 millones y representa el 88,4% del PBI. De dicho total U$S 192.579
millones es deuda entre agencias del Estado, lo que implica que no es una deuda
exigible y representa el 42,2% del PBI.
La deuda exigible se divide
en dos partes, la primera es deuda con los organismos bilaterales y
multilaterales, que asciende a U$S 76.205 millones y representa el 16,7% del
PBI. Esta es una deuda exigible, pero en muchos casos se negocia políticamente,
lo que hace que la refinanciación sea posible sin grandes desembolsos. La
segunda deuda es con el sector privado que asciende a U$S 135.501 millones y
representa el 29,6% del PBI. Esta es la deuda más exigible.
Del total de la deuda con
privados, mayoritariamente esta formalizada con títulos públicos, es en
dólares, tiene tasa fija y del total el 57% vence entre los años 2023 y 2029.
Conclusiones
.-Creemos que el próximo
presidente no tendrá incentivos a violar contratos y reestructurar la deuda
pública, ya que una buena parte esta mano del propio Estado. Esto lo dejaría
con una muy baja imagen positiva en el comienzo de su gestión, y lo dejaría imposibilitado
de ganar confianza en el mercado.
.-Llevar adelante un plan
del estilo Bonex para desendeudar al Banco Central y sacarse de encima el stock
de leliq no parece una buena idea, máxime cuando se puede trabajar en reducir
la exposición de este pasivo buscando más credibilidad y confianza. Hoy los
depósitos bancarios no son ahorros de largo plazo, más bien depósitos
transaccionales, inclusive los que se hacen a plazo fijo, por ende, una medida
de este tipo llevaría al país a una recesión de dimensiones desconocidas.
.-El único camino viable es
lograr superávit fiscal de las cuentas públicas, de esta forma se dejará de
emitir pesos, se logrará bajar la tasa de inflación, esto derivará en una caída
en la tasa de política monetaria, y gracias al efecto confianza la economía
podría volver a monetizarse.
.-Propuestas como la
dolarización y eliminación del Banco Central deberían ser un punto de llegada
para reformas de segunda o tercera generación, que no deberían ser tratadas
hasta tanto no se logre superávit fiscal y capitalizar al Banco Central
República Argentina.
.-La economía argentina
tiene aún muchas vidas por delante, es posible salir del estancamiento
económico, solo con trabajo, perseverancia y disciplina. Por eso creemos que
comprar bonos soberanos en dólares o en pesos son una muy buena opción.
Consulta por nuestros informes privados, en las redes sociales o
nuestra mesa de ayuda 0341 6 43 0555. Esta semana estrategias para colocar
excedente en pesos, lograr financiarse a corto plazo y pagar menos impuestos,
todo en una sola operación.
Salvador
Di Stefano SRL no se responsabiliza por el resultado final de las
recomendaciones efectuadas en el presente informe sobre operaciones económicas
y financieras llevadas a cabo por el usuario.